Ofrecer valor y comodidad a los viajeros de negocios puede ser un gran reto a la hora de integrar la sostenibilidad en un programa de viajes. Sin embargo, con la estrategia adecuada, la sostenibilidad y el bienestar pueden hacer que su programa de viajes sea atractivo para los empleados mientras ayuda a reducir las amenazas al medio ambiente. Ayude a sus viajeros de negocios a gestionar su bienestar guiándolos hacia una forma de viajar útil, cómoda e inteligente.
Viaje con un propósito y contribuya a reducir las emisiones
Cuando se trata de viajes de negocios, una de las formas más fáciles de reducir las emisiones es simplemente desplazarse menos. Esto no significa cancelar los viajes de negocios, sino evaluar cada uno de ellos y asegurarse de que los viajeros sólo se desplazan cuando es necesario. Implemente un modelo de «quedarse o viajar» para que los viajeros puedan tomar decisiones seguras que se ajusten a los objetivos de su empresa. ¿Una ventaja? Menos viajes de negocios no sólo ayudan al medio ambiente; los viajeros también tienen más tiempo para hacer cosas en la oficina y en su vida personal.
Viaje cómodamente
Si reduce el número de viajes anuales y colabora estrechamente con sus proveedores, podrá aprovechar su presupuesto para ofrecer mejoras a sus viajeros de negocios, como asientos con más espacio para las piernas. Los empleados que llegan más descansados suelen ser más productivos.
Hoteles cómodos y confortables
Cree un portafolio sólido de hoteles para sus viajeros, con los que ellos se sientan cómodos. Al seleccionarlos, concéntrese en algunos elementos clave:
- Cercanía a la oficina o al lugar donde se harán los negocios
- Nivel de confort y servicios
- Iniciativas de sostenibilidad o certificaciones ecológicas
Es importante tener en cuenta que la huella de carbono de una noche de hotel es una fracción de la de un vuelo. Al ofrecer hoteles con certificación ecológica a sus viajeros, les ofrece otras garantías: el compromiso del hotel de gestionar mejor el agua, la energía y los residuos, además de trabajar activamente en la protección de la economía y la biodiversidad locales.
Tren versus avión
Tomar un tren es, en promedio, 20 veces más eficiente en términos de emisiones de carbono que volar. Además, los trenes ofrecen otras ventajas, como más espacio para estirar las piernas y desplazarse. Dar prioridad a los trenes es una buena opción en mercados como Europa, China, Japón, la costa este de Estados Unidos y el noroeste del Pacífico estadounidense.
Clase ejecutiva para vuelos de larga distancia
Cuando la política de viajes y la planificación lo permitan, reserve a sus pasajeros la mejor clase de servicio posible en vuelos con pocas escalas o sin ellas.
Elija el auto del tamaño adecuado
Recuerde a sus viajeros que el tamaño del auto es importante. Oriéntelos para que reserven uno que se ajuste a las necesidades de sus viajes sin comprometer su bienestar y seguridad. Si el transporte público o compartido no son factibles, anímelos a reservar el vehículo más pequeño posible en el que quepan todos los pasajeros.
Coma sano durante el viaje
Proporcione a sus viajeros guías con alternativas gastronómicas saludables. ¿Sabía que comer menos carne es bueno para el medio ambiente? De hecho, si cada persona de la Tierra redujera su consumo de carne a la mitad, el ahorro de CO2 sería equivalente a lo que emite la industria aérea en todo un año.
Viaje de forma inteligente
No existe un enfoque único para equilibrar las prácticas sostenibles con el bienestar de los viajeros. El análisis de los patrones de reserva y viaje de sus empleados puede revelar posibles puntos débiles en su programa. Algunas preguntas que deben hacerse son: ¿cuándo y con qué frecuencia viajan sus empleados?, ¿cruzan alguna zona horaria en un viaje determinado?, ¿usan vuelos directos o con escalas?, ¿cuánto tiempo pasan viajando y cuánto en casa durante un mes?
El jetlag puede afectar bastante la salud y productividad de los viajeros, pues los patrones de sueño cambian a una nueva región. Algunos viajeros de negocios también informan que viajan por trabajo fuera del horario laboral o durante los fines de semana. TEs muy importante tener en cuenta estos factores, ya que pueden provocar frustración y agotamiento. Algunas soluciones podrían ser animar a los viajeros a juntar reuniones, para reducir el número total de viajes; verificar si un colega local puede asistir a una cita determinada; comprobar si el destino puede cambiarse, para reducir el desplazamiento, entre otras. Otra forma de lograr un cambio positivo podría ser pasar de una política de gastos a una centrada en el viajero, en la que la comodidad y la calidad tengan prioridad.
Para obtener más orientación sobre cómo incorporar el bienestar y la sostenibilidad a su programa de viajes, contacte a su program manager. ¿No es cliente de BCD Travel o Advito? Póngase en contacto con nosotros para empezar a personalizar su programa de viajes.